Mi locura y mi cordura.

Mi locura y mi cordura.

Mi mundo ha cambio, sigue perdido entre mi demencia y la cordura.

Había soñado con el mundo perfecto, la pareja ideal y los amigos que hoy no están.

Poco a poco se tejen historias en mi cabeza en el rumbo del deseo, un deseo ya inexistente como tantas almas dejaron sus cuerpos ya.

Con la mirada perdida y mis ojos desencajados, mis manos que antes escribían hoy viven trabadas.

El tiempo se ha detenido en una parte mi historia, como para recordármelo por siempre y para siempre.

Viviendo en una ficción que el destino quiso para mí.

De aquel hombre con el  porte galante, el de la mirada quizás soñadora hoy solo existe recuerdo, porque aun recuerdo cuando estabas conmigo, bendita cordura.

Hoy te has ido y me has dejado entre sueños como un loco caminando y con la misma música en mi cerebro.

Como para no olvidarlo, cada noche de luna llena mis pensamientos ya no son los mismos  vagan entre el delirio y mis sueños febriles.

Te busco en  el crepúsculo de la noche, cuando vago por el mundo, cuando abandono mi fría.

Volando entre nubes, mi pluma y mi tintero  a mi lado como mis grandes compañeros.

Al caer la mañana la afonía  vuelve a mí, silenciando mis  más grandes momentos.

Frente al espejo miro al hombre perdido, aquel que ya no es dueño de su historia.

Aquel que hoy  escribe a oscuras y con sin música.

Oculto y misterioso el poeta, hoy vive perdido entre pensamientos y alucinaciones.